Tras recoger las latas vacías y avisar de que estábamos a punto de aterrizar, el azafato de Easyjet se dispone a arreglarnos la vida:
-Señores, señoras, antes de aterrizar les proponemos que participen en este sorteo, en el que por un euro y medio pueden conseguir hasta 15.000 euros. Sólo compren una papeleta y esperen que la suerte llegue.
Acto seguido, recorre el pasillo ofreciendo los sobrecitos que pueden resolverle la vida a alguien. ¿Hasta ese punto tiene que llegar una compañía aérea?
Ryanair lo hace siempre. Incluso vende (muy bién por cierto) un calendario con sus azafatas ligeras de ropita.
Hago recorridos semanales con esa compañía y no tengo queja. No suelo comprar nada en esos vuelos pero el otro día me picaba el hambre y compré un perrito. Me costó 5 euros, ¡lo mismo que el billete!
Qué cosas. Bueno, las loterías no son ignominiosas... la universidad de Islandia se financia (y estupendamente) con una lotería estatal.
Pero lo del calendario empieza ya a tomar derroteros tremendos. De aquí a poco pondrán apartados dentro del avión para que, por un módico precio, pueda Usted fornicar con el sobrecargo. Luego resultará que lo han filmado y venderán copias dentro del mismo vuelo.
Crisis? Pero si todo el mundo sabe que para ahorrar trillones y trillones de dólares lo único que hay que hacer es poner un chícharo menos en los platos o una cosa así.
Easy Jet lleva vendiendo esas papeletas desde que abrió y comenzó a volar en Europa... Y no son fraudulentas... y por tanto no las comercializa "para hacer frente a la crisis". Ahora todo el mundo pone la palabra crisis por delante antes de empezar a hablar. No es que me entusiasme volar con ellos, pero conozco lo de esas papeletas porque llevo muchos años de un lado a otro de Europa y me tome la molestia de comprobarlo.